Distinguidos colegas, representantes y aliados de la salud,
Es un honor dirigirme a ustedes en nombre de la Confederación Médica Ibero-Latinoamericana, una organización que une a miles de médicos de nuestras regiones con un propósito común: defender los derechos de nuestra profesión y trabajar por una salud digna, ética y accesible para todos nuestros pueblos.
En un momento en que la medicina enfrenta desafíos sin precedentes, reafirmamos nuestro compromiso con tres pilares fundamentales: la defensa del trabajo médico, la ética profesional y la promoción de políticas de salud que beneficien tanto a los médicos como a las comunidades que atendemos.
- En defensa del trabajo médico
La práctica médica no es solo una profesión; es un llamado, una vocación que exige dedicación, preparación continua y sacrificios personales. Sin embargo, enfrentamos realidades preocupantes:
• Sobrecarga laboral en ambientes que muchas veces no garantizan los recursos necesarios para brindar una atención de calidad.
• Precarización del empleo médico, que amenaza la estabilidad laboral y desmotiva a los nuevos profesionales.
• Violencia en el entorno laboral, un problema creciente que pone en peligro no solo nuestra integridad física, sino también nuestro bienestar emocional.
Es urgente abogar por condiciones laborales justas y seguras, salarios dignos y políticas que reconozcan y valoren el trabajo médico como pilar esencial de las sociedades.
- La ética profesional como estandarte
En el ejercicio de nuestra profesión, la ética no es negociable. Como médicos, debemos seguir guiándonos por los principios de respeto, confidencialidad, empatía y justicia. Pero no podemos hacerlo solos; es necesario que los sistemas de salud y los gobiernos sean nuestros aliados, garantizando marcos regulatorios que respalden la toma de decisiones éticas.
Defender la ética implica también rechazar cualquier forma de corrupción, nepotismo o prácticas que antepongan intereses políticos o económicos al bienestar del paciente.
- Políticas de salud para mejorar el entorno y el impacto médico
Las políticas de salud deben estar diseñadas no solo para responder a las crisis, sino también para anticiparlas y prevenirlas. En este sentido, instamos a:
• Invertir en infraestructura hospitalaria y tecnológica.
• Ampliar el acceso a la educación médica continua, fomentando la investigación y la innovación en nuestras regiones.
• Garantizar sistemas de salud más inclusivos, que reduzcan las inequidades y prioricen las necesidades de las comunidades más vulnerables.
Como Confederación, nos comprometemos a trabajar con gobiernos, organismos internacionales y entidades académicas para diseñar políticas que garanticen un futuro sostenible para la salud pública.
Conclusión
La defensa del trabajo médico y de la ética profesional no es solo una lucha por nuestros derechos, sino una batalla por el bienestar de nuestras naciones. Cada médico que trabaja con dignidad y en condiciones adecuadas representa esperanza para sus pacientes y sus comunidades.
Hoy, la Confederación Médica Ibero-Latinoamericana se erige como una voz firme y unida en defensa de los médicos y de los valores que hacen de nuestra profesión un motor de cambio social. Sigamos construyendo juntos un sistema de salud más humano, ético y solidario.